Los días cada vez son más cortos y la energía disminuye… Por ello la llegada del otoño nos susurra a gritos un ajuste en nuestras rutinas diarias y comidas.
Según el Ayurveda, somos energía en movimiento, y la armonía es el secreto del equilibrio. Estamos formados por los cinco elementos (aire, fuego, agua, espacio y tierra) y éstos se combinan y manifiestan en el cuerpo como tres bioenergías o fuerzas biológicos conocidos como Doshas y son tres: Vata, Pitta y Kapha. Sin estas bioenergías, no sería posible el milagro de la vida porque no se producirían los procesos necesarios de movimiento (Vata), transformación (Pitta) y cohesión (Kapha). Todos estamos formados por estos tres Doshas, sin embargo, en cada persona predomina más uno u otro, por ello cada persona es única. El secreto de la salud según Ayurveda radica en el equilibrio de estos tres Doshas, que se consigue a través de la alimentación y masaje Ayurveda, el yoga, el pranayama y la meditación.

Durante el verano, el calor penetra en nuestro cuerpo, las plantas y la tierra y vamos acumulando la cualidad «seco, áspero». Cuando llega el otoño, la acumulación es tal que este exceso se traduce como una explosión de Vata Dosha. Recordamos que Vata es energía de movimiento, y en desequilibrio se traduce en ansiedad, altibajos emocionales, insomnio y sequedad interna (estreñimiento, piel seca, sequedad vaginal, caída de pelo…).
Esta cualidad seco, áspero, también genera micropartículas de polvo e impuridad que cuando llegan las primeras lluvias van al ambiente y las respiramos. Esto genera infecciones del tracto respiratorio (mucosidad, resfriados, congestión nasal, gripe…). Esto se traduce como un aumento de la cualidad «húmeda» y un agravamiento de Pitta, el dosha que representa la energía de transformación y que en exceso causa infecciones e inflamaciones.
El juego Vata y Pitta es el predominante en la estación de Otoño.
La ley que gobierna sobre nosotros es la ley de la naturaleza. Acomodarse adecuadamente para el otoño predispone a una mayor salud durante el resto del año.
Así como las hojas de los árboles se secan y se caen en otoño, nosotros también nos secamos y nos debilitamos en otoño.
Esto explica por qué el Ayurveda presta mucha atención a las estaciones del año, y en particular al otoño.
Consejos de Ayurveda para Otoño





Suelta lo que no es para tí
Nos corresponde soltar lo que ya no necesitamos, desapegarnos de las formas de ser que ya no dan fruto
Conecta contigo
El ritmo frenético, el exceso de actividades y las exigencias del día a día pueden causar una hiperactividad mental. Dedícate 10minutos al día y notarás la diferencia. Meditación y respiración pranayama son tus aliados
Incorpora alimentos que tengan las cualidades opuestas a la estación, es decir: introduce alimentos calientes, untuosos y nutritivos.
Porridge caliente de avena o trigo sarraceno,
Verduras de temporada cocinadas al vapor, al wok o en forma de cremas, especiadas con una pizca de pimienta negra y cúrcuma; ya que tiene poder antiinflamatorio y ayuda a limpiar internamente.
Semillas de calabaza, de sésamo, de amapola, gomasio, tahini.
Las reinas de las frutas son la granada y los frutos rojos.
Mima tu piel
Con aceite de sésamo caliente en la cabeza y en el cuerpo
Aplícate aceite cada día, no sólo para hidratar la piel sino para aumentar circulación tanto en las piernas como en el cuero cabelludo y así contrarrestar la caída del cabello.
Respeta tu sueño
Escucha a tu cuerpo y descansa todas las horas que necesites. Ve a dormir más temprano aprovechando que cada día anochece antes y crea nuevos hábitos: desconecta los aparatos electrónicos al menos media hora antes de dormir.
¿Te apuntas al reto de la calabaza?
Para recuperar la flora intestinal toma durante 1 semana la crema de calabaza ayurvédica